Propóleo para mejorar la salud de nuestras abejas

El propóleo es la mezcla de resinas de diferentes plantas recolectadas y procesadas por las abejas, utilizadas para aislar la colemna. 

Las abejas que viven en cavidades de árboles huecos cubren toda la superficie interior con propóleo, pero cuando están en nuestras colmenas de madera lisa, sólo cubren las grietas y huecos que encuentran en la madera, entre los bordes de los cuadros y entre alzas.

Según nos dicen en su artículo Michael Simone-Finstrom y Marla Spivak cubrieron el interior de sus colmenas con tintura de propóleos y descubrieron que las abejas que viven en un ambiente rico en propóleo tienen un sistema inmune menos activo al actuar el propóleo como una barrera natural frente a enfermedades, lo que redunda en un menor gasto energético por parte de la abeja.

Según el artículo , los propóleos ayudan a prevenir enfermedades como la varroa o la loque, ya que el propóleo tiene cerca de 300 sustancias químicas, por lo que es más difícil para los parásitos desarrollar una resistencia al propóleo que a un medicamento con una sustancia química concreta.

En nuestras latitudes parece ser que la principal fuente de propóleos son los chopos (Populus sp.) pero está claro que otros árboles como pinos, abedules, olmos, alisos y hayas entre otras, son fuentes adecuadas de propóleos, sobre todo cuando no se encuentran chopos cerca.

Los autores del artículo proponen conseguir una mayor cantidad de propóleos en nuestras colmenas rallando el interior de las cajas con cepillos de alambre o lijas, creando rugosidades que las abejas cubrirán con propóleos. ¿Probamos?